En ciudades como Naucalpan, Toluca, Atizapán o Metepec, donde el mercado está saturado y el cliente exige calidad, escuchar se vuelve una herramienta poderosa. Y no hablamos de intuición: hablamos de usar encuestas y reseñas como base para mejorar procesos, productos y atención.
Muchas veces se piden opiniones solo para “cumplir”, pero no se analizan ni se aplican. Y eso es un error. Una encuesta bien hecha puede mostrarte qué está fallando, qué valoran tus clientes o qué tendencia nueva podrías aprovechar. Lo mismo con las reseñas: cada comentario, positivo o negativo, es información valiosa si sabes leer entre líneas.
No necesitas un sistema complejo: bastan acciones constantes. Revisa tus reseñas de Google y redes al menos una vez por semana. Haz una encuesta mensual a tus clientes más frecuentes. Registra las quejas o sugerencias que se repiten. Luego, toma decisiones concretas.
En Edomex, donde hay muchas opciones para cada necesidad, escuchar al cliente y responder con acciones te hace diferente. Las decisiones más inteligentes no siempre nacen de grandes estrategias, sino de saber poner atención donde otros no lo hacen.